miércoles, 27 de julio de 2011

hoy estamos de cumpleaños


Hoy mi blog cumple 4 años.
Me acuerdo de ese día, empecé y ya nadie me pudo parar. Por él conocí a muchas personas y de varios lugares del mundo que ni pensaba. En él puse mucha energía.
Hace 4 años era mamá de 2 niños, ahora de 3.
Estaba más delgada, más joven, no usaba facebook, y creía que ésto iba a ser para mí un momento pasajero.
Hoy forma parte de mi vida y se pudiera querer las cosas virtuales, podría decir que hasta lo quiero y a veces lo extraño.
Lo que ven aquí soy yo, o mejor dicho es una parte de mí que quiere ver la vida con los mismos ojos pero con un humor que a veces quisiera estuviera en mí todo el tiempo. Aunque a veces se me suelta la cadena y sale mi vaso medio vacío, con mis broncas y debilidades.
Muchos me leen por facebook y ya voy a encontrar la forma de subir sus comentarios acá.
Gracias por acompañarme en ésta travesía...bienvenidos de nuevo al tren...
Sigo siendo no normal, ni me pasan cosas normales, ni me junto con gente común...por suerte eso hace que siga siendo yo.

p.d: la imagen es "tomada prestada" de http://jgll.blogspot.com/2008/08/tarta-de-cumpleaos-4-aos.html, me gustó porque el 4 está al revés....como muchas cosas en mi vida!!!

jueves, 21 de julio de 2011

sin palabras... pero con dudas



Miren lo que remarqué. Este es una versión nueva de un antiguo producto.

Mi duda es: ¿antes con que se hacía?.....papel picado? arena procesada....???...ummmm

miércoles, 20 de julio de 2011

El especialista



Llegué hasta él hace más de un año, para comprar unas escobitas (como las de uso doméstico) pero chiquitas, para que la pequeña de la casa y la prima de la misma edad dejaran de usar las “verdaderas”; están en su etapa que agarrar el cepillo, el balde y la pala en momentos inoportunos y destruir todo a su paso en su afan de limpieza. Trataba de evitar los cada vez más frecuentes accidentes (son dos monas con navaja). Cuando sean adolescentes y les pida que barran su dormitorio, ni con una escoba de seis metros van a querer…pero por ahora, las dejamos jugar a la limpieza.
Alicia (la dueña de la mercería) que tiene de todo, menos escobas, me dijo: andá a calle 3 de febrero al 4300 y si ahí no hay, no existe.
El señor muy amable, me ofreció de varios precios, calidades, etc, compré las dos más baratas y partí. Pero soy mujer, y en una sóla mirada descubrí ese mágico mundo de la limpieza, conducido por él y su familia. Es la parte de adelante de una casa (un antiguo garaje o living a la calle transformado en comercio) apenas uno entra, el que está detrás del mostrador te saluda, y te regala dos cubanitos de dulce de leche para endulzar la espera. Atiende a cada persona con una tranquilidad y seguridad sobre lo que vende que hasta creo que podría dar cursos (tengo varios alumnos para mandarle). ¡Ni el ginecólogo me atiende tan bien!

Olvidé la dirección, pero buscando una producto para blanquear, ya no recuerdo que, salí en su búsqueda y lo encontré. Es “EL ESPECIALISTA”, en el comercio entran no más de dos o tres personas, y del piso al techo hay productos exclusivos de limpieza: industriales, hogareños, saca sarro, manchas, pulir y encerar. Allí hay elementos nuevos y viejos, desde una tabla de lavar de madera hasta diecisiete productos para sacar la misma mancha. El dueño es un showman en sí mismo, dice que atiende como a él le gustaría que lo atendieran. Delante mío entra un hombre pidiendo una escoba (en la vereda debe haber por lo menos 10 modelos distintos), la pregunta que escuché es la que menos me esperaba: ¿para que la va a usar? ¿que tipo de piso tiene? ¿la usan uds. o un empleado? Cuántos metros cuadrados necesita barrer ¿? Abrí los ojos grandes como balcones y el cliente (que se ve que ya lo conoce) le responde: “es para mi uso personal, para limpiar el taller, una o dos veces a la semana. Entonces él le recomienda: ESTA. Para mí, no varía de las otras nueve escobas pero él de da propiedades que yo creía imposibles de recordar y menos, de diferenciar entre esa y las de la vidriera. Habla de los materiales con que fueron construidas, la cantidad de paja por centímetro cuadrado y el poder del barrido en una sola pasada, lo que la hace la ESPECIAL para ESA tarea. El hombre salió con la escoba en mano y me atendió: yo comía cubanitos rellenos y le iba diciendo las características de mis pisos, quien realiza la limpieza, cada cuanto, porque según él: “hay un producto para cada necesidad”. Me encontré comprando un líquido italiano industrial para sacar las manchas de la bañera, un limpiador cremoso industrial (tipo cif) que hay que rebajarlo con agua. Debía leer las instrucciones primero, y verificar que las condiciones de limpieza fueran las adecuadas; si la bañera estaba mojada, seca, era antigua o nueva, que tipo de shampú usábamos, si hacíamos baños de inmersión…
Los productos que vende son excelentes y los industriales no están rebajados con nada y son empleados en hoteles, restaurantes, donde no tienen tiempo de dejar actuar las sustancias. Es pasar, dejar limpio, con buena fragancia y no tóxicos, De cada producto me explicaba la forma de uso y sacaba un trapo y los pasaba por algún mueble o pared, según fuera mi necesidad. Lo que me hacía sentir como las estúpidas de las publicidades que limpian cocinas y de una sola pasada sacan manchas de tiempos inmemoriales.
Creo que si el hombre fuese más jóven y le pusieran una capa, podría ser el Señor MR. Músculo de las publicidades que todos conocemos.
Dos horas de mi vida estuve ahí oyendo las explicaciones, combinaciones de productos, diferencias y cualidades imposibles de verificar por mí….pero me las dio todas. Me encontré pensando en mi casa, pero vista de otra manera (muy loco no?) Fue genial el remate de la venta: “no le diga a nadie los productos que usa, es un secreto entre Ud. y yo…sus amigas van a envidiarla. Yo no necesito más clientela, mis productos se venden solos. Guarde ésta información para Ud”.
Todavía éste señor me saca una sonrisa por su picardía e inteligencia….pero volviendo a mí, ¿vieron que siempre les digo que no soy normal y no encuentro en mi camino gente normal? Este es otro episodio…

lunes, 18 de julio de 2011

a seguro se lo llevaron preso II parte

Llego a la compañía de seguros, voy a la empleada que le había entregado mi carta (pidiendo hagan una excepción por no haberles avisado al 0800 que me quedé fuera de mi casa por cerradura rota y tener el coraje de llamar al cerrajero por mi cuenta). La chica hablaba por teléfono, tomaba su té, se sonó la naríz, se comió un caramelo y recién ahí me atendió. Hizo de cuenta que yo era la persona 5000 de ese día y le resultó extraño todo mi proceder, así que le dije: "tenés que darme la orden para cobrar", hizo varios papeles, fue y volvió de la impresora mil veces...
En eso viene un muchacho (grande) empleado de la empresa cantando: "que bueno levantarse una mañana y ser millonario"!!! y repetía la canción varias veces en tono alto... mi mirada no lo intimidó. Me dieron el papel y fuí a la caja: ese día no se pagaba porque había balance..
El empleado del banco me dijo: "¿quién fue el inepto que te da ésto para cobrar?". Mi dedo acusador señala el escritorio...
Vuelvo a hablar con la fulanita, el muchacho seguía sonriente mientras hablaba por teléfono. Ella se re extrañó, que hubiera balance, le pregunta a él...me mira y me dice ¿que día es?, Cierto!!!! hace como 15 días llegó un mail y no tuve tiempo de mirarlo, volvé mañana!!!...al día siguiente me pagaron...ya me lo gasté...

martes, 5 de julio de 2011

de piojos no se habla



Si mi madre me viera escribiendo sobre los piojos se muere, ella es de la época en que nadie los nombraba, se ocultaba, los varones desaparecían dos o tres días de la escuela y volvían rapados a la vida…aún en pleno invierno. Las nenas con rodetes tirantes, pelos más cortos o pañuelos en la cabeza. De "eso" no se hablaba, por lo menos en voz alta, era un tema relacionado con la suciedad y la mugre. Más tarde miles de chicos sufrieron la pestilencia del kerosene en la cabeza, y algunos ¡hasta con quemaduras! todo evoluciona pero como las cucarachas, creo que si hay una bomba nuclear, ellos sobrevivirían.
Hoy en día las madres lo hablan a viva voz, no hacen faltar a un crío a la escuela ni de casualidad y le echan la culpa a los areneros, a las otras madres, a las piletas, a los cumpleaños, a la escuela, a la vida, a la época del año y, mucho de lo que se repite es de pura ignorancia o por “no querer saber”
Argumentos:
1- “las fábricas que venden antipiojicidas, los arrojan en los areneros de las plazas para vender más” (alguien tiene fotos de éste complot mundial) ¿el que trabaja de eso se llamará: “sembrador de piojos”? ¿qué obra social tendrá?¿ empleados de comercio?
2- ¡Se contagian en la escuela! El lunes viene lleno de piojos ¡tendrían que fumigar las escuelas el fin de semana! Si los piojos tienen que tener un cuero cabelludo a mano para alimentarse, por ende en las escuelas el fin de semana los piojos se mueren…
3-¡Le saltan de la cabeza de los compañeros!: ¿se agarró piojos o saltamontes?, los piojos no saltan, quien haya sacado uno de una cabeza, y ve a esa porquería que solamente chupa sangre y pone huevos moverse centímetros se da cuenta que es incapaz de dar un salto aunque sea de pocos milímetros.
Y así sigue la historia…
Pero empecemos por el principio, el tema inicia así: cuando uno no es madre y no ha tenido hermanos menores piojosos, piensa que cuando sea progenitora sus hijos no tendrán éstos bichos….sos madre, tú hijo se rasca, pensás que es alergia a alguno de los componentes del champú, cambiás de marca, y cuando inspeccionas te encontrás con un piojo. Ya culpás a la vecina, al cumpleaños de la semana pasada, a quien haya venido de visita que tiene niños a diez km de distancia y empezás a repetir sin saber: le "saltaron" de algún lado…
Pero el tema es que si despiojaste a tú hijo y justo se enfermó y faltó una semana entera a clase y no vió a nadie: tiene piojos igual.
Entonces ante la vergüenza, vas a la farmacia y preguntás por algún método natural, porque ya probaste el vinagre, el peine fino, y la farmacéutica te vende la mentirosa cuasi amarga y te dice que la mezcles con vinagre, la dejés macerar quince días y le pasés con un algodón….creés que has encontrado el famoso método natural, sí, vos solita, pero la cuasi amarga es un invento de los farmacéuticos para sacársela de encima, deben haber comprado veinte toneladas hace años y ¡algún tonto nuevo debe caer! Es como si en la óptica te vendieran monóculos porque están de última moda. Ya voy a encontrar quien es el maléfico que le puso poderes inexistentes a la cuasia y quién la planta y le haré un juicio millonario….seguramente muchas madres de ya adolescentes se unirán a mi demanda…
Luego seguís con esa crema, con un producto natural….o no tan natural….
¡NO HAY PRODUCTOS NATURALES PARA MATAR ESTOS BICHOS!
¡Ni intenten con ajo macerado! La única forma con el ajo es comprarte una riestra e ir lanzándoselos a los niños en la cabeza (tengan a mano el teléfono de emergencias médicas por las dudas)
Luego aprendés que el secreto está en eliminar a las LIENDRES, huevitos minúsculos que casi no se ven y que brillan al sol cuando están vivos y se opacan cuando están vacíos. Para éstos se ha implementado un siniestro aparato de tortura, que le dicen: peine fino, de color plateado (que hacen cuasi imposible ver si has cazado una liendre o piojo) en cuyo extremo al pasarlo se meten los piojos, entonces debés calentar una taza de agua y ahí colocar el peine entre pasada y pasada para matar a los escondidos en la hendija.
Si tenés un solo hijo la cosa se pone mal, empiezan las peleas a la hora del peine, porque ese instrumento: le tira, le arranca los pelos, las puntas del peine le hacen mal ¡y es cierto! Nosotras somos algo así como Fredy Crugger y es una tarea que también nos desagrada y un lugar que nunca desearíamos tomar!
Cuando tenés dos o tres críos la tarea es titánica, terminás con olor a producto insecticida hasta en los calzones, calculando los diez minutos por chico y la pasada de peine, y la taza con agua hirviente, y el papel blanco para sacar los piojos del peine y encima, es como los bostezos, le encontraste un piojo y te empieza a picar, desesperadamente…Y para colmo peleada con todos los críos que ya ni se rascan cuando tienen diez piojos y vos crees que te agarró una marabunta cuando tenés tan solo uno. Y si cuando realizás ésta tarea tan desagradable está tu marido, madre, abuela, te dicen: “le estás tirando el pelo al nene, le duele….” No, ¡si a mí me encanta! Además cada crío se retuerce, se aleja, se baja, se sube, se acerca, y uno va haciendo contorsionismo, mientras le promete cosas y le prohíbe otras, para toda su vida.

Vas a la farmacia y le preguntás que producto es casi una bomba nuclear, ya no importa si es natural, de triple receta archivada ó experimental ¡querés eliminarlos! y salís con ese producto que dice: envuelve a las liendres neutralizándolas y disecándolas no dejando que eclosionen y mata los piojos al solo contacto, sintiéndote un poco mal por desearle a un ser vivo tan catastrófico final, pero a la vez feliz por haber encontrado la sustancia exterminadora de tus problemas, ponés el producto y a los tres días tú hijo tiene los mismos piojos o sinó más.
Vas a la dermatóloga y te dice con voz de tonta: “paciencia y peine fino” ¿y que creés que hago en casa, sentarlos a la mesa y ponerles nombre? Porque eso ya es lo único que te falta ¡ si los encontraras a simple vista lo terminaríamos haciendo!
Ya no es de ricos ni de pobres, de limpios o de sucios, de mujeres o de hombres.
Creo que es una pequeña invasión alienígena que empezó hace mucho tiempo viniendo en sus diminutas naves y pronto nos conquistarán... ¡yo me dí por vencida!