martes, 15 de marzo de 2011

¿Y la culpa siempre es mía?


Hoy intenté reiteradas veces usar mi teléfono celular. A penas discaba daba el siguiente mensaje: "tú línea está próxima a ser suspendida por deuda. Por favor comunícate con el * 611". Lo converso a las pasadas con mí marido quien me dice que no está seguro y no puede chequear el pago desde donde está.
El celular no lo necesitaba, pero basta no tenerlo para que me sea imprescindible. Es como el corte de luz, en que se te ocurre mirar Tv, planchar, o hacerte los rulos!!!
Busco mi tarjeta de crédito para efectuar el pago del mismo por teléfono.
Mi Tarjeta no aparece en ninguno de los posibles lugares de abandono de la misma. No recordaba haberla usado desde hace tiempo y me empezaron a temblar las piernas ¿y si la perdí? ¿y si hicieron compras a mí nombre?, la búsqueda se volvió cuasi desesperada hasta que finalmente decidí cortar por lo sano y efectúo el llamado a la tarjeta para saber si han realizado compras a mí nombre por estos días…
Después de dar con el teléfono correspondiente (lo cual es difícil sin la tarjeta) y con los Marque 1…marque 2, marque 3, (que nunca corresponden a la consulta que uno quiere realizar) doy con un veinteañero que se ufana de su ¿saber? ante mí (porque desde ya dan por sentado de que uno es una imbécil) y preguntan:
Empleadito de tarjeta: ¿está segura que la extravió? ¿Dónde la extravió?
Yo y mis pensamientos: (si supiera no estaría extraviada, al menos que se me hubiera caído en una alcantarilla muy profunda, o hubiera quedado en el pozo de los mineros chilenos),
E de T: ¿la buscó?
Yo y mis P: (no, sí te llamo para saber si tienen el servicio de búsqueda domiciliaria)
E de T: los lugares de guardado de tarjetas son: carteras, billeteras y cajones ¿buscó ahí?
Yo y mi lengua larga: porque no tenés niños pequeños, en casa los lugares de guardado son los más alejados de la altura de sus manos.
E de T: Que no tenga su experiencia personal con niños no es motivo para que Ud. me de esa respuesta…
Yo y mi lengua larga: es una ironía, ya busqué, en todos los lugares…
Y ahí me da 24 hs para buscar mi tarjeta, e inmediatamente me la bloquea, y gracias a mis súplicas me dice que no han efectuado compras con la misma…
El tema no estaba solucionado…
Ahora efectivamente no tenía ni celular ni tarjeta…
Empiezo a buscar mi tarjeta nuevamente, la encuentro (en donde tenía que estar, por supuesto, que no es ni en una cartera, ni en un cajón y mucho menos en la billetera) y da la casualidad que me atiende el mismo empleado (tengo una memoria asombrosa para las voces, que no me sirve para nada, excepto para como en éstos casos, no pasar por idiota reiteradamente)
El E de T: quiso saber si era yo, así que chequeó de nuevo todos mis datos (excepto mi grupo sanguíneo y si era dador de sangre), como si uno no pudiera mentir descaradamente y hacerse pasar por otra persona…..(pero eso es otro tema)
Y me pregunta ¿en donde estaba?....le respondo: entre unos papeles del escritorio. Me la activó y ahora estaba como al principio. Le dí las gracias y llamé a la telefonía celular para pagar mi supuesta cuenta.
No podía comunicarme con el *611 ¡¡¡¡¡¡porque no me dejaba hacer llamadas!!!!! Y los teléfonos celulares no tienen un teléfono fijo de emergencias!!! Intento en varios números, todos tenían el latiguillo: “tú línea está próxima a ser suspendida por deuda…..”, finalmente me atiende otra pre adolescente inexperta que me dice que estoy equivocada, que el vencimiento de mi TE es el 21/3 y que no tengo deuda, que puedo hacer llamadas y que esa frase no está en mí TE. O sea: me trató de loca y de aburrida. Me pide además que deje de hablar por el altavoz del mismo, (cosa que no estaba haciendo) y me dice que no me escucha, a lo cual le respondo: nadie me escucha, ese es otro de los problemas que tengo con la empresa, pierdo señal en medio de toda conversación…
Hizo de cuenta que no me escuchaba. Me volvió a reiterar que no debía pagar (aunque yo le insistía) dice que me reinició el sistema (cosa que dudo, creo que te dejan con esa musiquita que la eligió el enemigo para que uno se aturda y corte) y me dice: apague el equipo, en un rato vuelva a prenderlo y el mensaje desaparecerá. Lo hice. El resultado es que ahora escucho todas las veces la voz que me dice que tengo deuda, y luego puedo hablar. Es más, llevé a los críos a un cumple y nos quedamos con unas madres tomando un café y les dí a chequear mi TE y TODAS escucharon el flamante y original recordatorio de mi TE….. Gracias a ellas confirmé que no escucho voces!!! o todas sacamos turno con el mismo psiquiatra!!!
Por favor señores de la telefonía, podrían agregarle al recordatorio, que tengo que sacar turno con el médico que siempre me olvido, que le dé a la mamá de Camila el libro que compré, y otras cosas que realmente me harían falta????
Gracias…y ya sé que la culpa es mía: por confiar en la eficiencia de Uds!!!
¿Y si volvemos al vasito con el hilito para comunicarnos?

1 comentario:

12ds dijo...

A mi me pasa lo mismo!!

Cómo se puede solucionar?

Me prende fuego cada vez que llamo me dice eso!!!

Saludos!